Thursday, February 25, 2010
Hijo de puta uno y dos: ojalá los chancros se coman sus huevos
Del Videsa fuimos al San Juan, y del San Juan a dejar a mi primo y a dormir.
Después de una noche de tomar alcohol con apuro por llegar tarde al bar, mi cabeza daba vueltas y aunque tal vez yo estaba pensando en cualquier cosa, mi boca se mantuvo ocupada balbuceando no sé cuánta cosa en el camino a la casa, y al llegar al porche y antes de bajarme a abrir la reja prometí más adelante continuar con la conversación.
Al abrir la reja escuché un golpe en el cofre del carro y, borracho como estaba, solo pude gritar "ay wey" según yo como de susto y alivio a la vez porque pensé que se trataba de un gato o algo por el estilo, y cual fué mi sorpresa al voltear y toparme con un tipo que de un salto ya tenía una pistola en mis costillas y otro que al mismo tiempo encañonaba a mi embarazada novia en la barriga.
El hijo de su puta madre 1 (el que se fué conmigo, le llamaremos "uno") me pedía no muy originalmente que le diera todo lo que tenía, a lo que yo reaccioné dándole mi cartera sin un sólo centavo, mis cigarros casi recien comprados y mi celular no muy ostentoso, igual reaccionó mi novia con el hijo de su puta madre 2 ("dos").
Todo estuvo muy raro, ofrecimos que se llevaran el carro pero que nos dejaran tranquilos y no accedieron, ellos querían sólo las carteras y los celulares, y picarme con la pistola en las costillas lo que me dejó adolorido, y encañonar a mi novia en la barriga lo cual me provocó un coraje que me duró toda la noche con todo y actuación dramática mientras dormía (hablo dormido).
Fuga, México está bien culero y más Chihuahua. Uno y dos: chinguen a toda su madre.
Después de una noche de tomar alcohol con apuro por llegar tarde al bar, mi cabeza daba vueltas y aunque tal vez yo estaba pensando en cualquier cosa, mi boca se mantuvo ocupada balbuceando no sé cuánta cosa en el camino a la casa, y al llegar al porche y antes de bajarme a abrir la reja prometí más adelante continuar con la conversación.
Al abrir la reja escuché un golpe en el cofre del carro y, borracho como estaba, solo pude gritar "ay wey" según yo como de susto y alivio a la vez porque pensé que se trataba de un gato o algo por el estilo, y cual fué mi sorpresa al voltear y toparme con un tipo que de un salto ya tenía una pistola en mis costillas y otro que al mismo tiempo encañonaba a mi embarazada novia en la barriga.
El hijo de su puta madre 1 (el que se fué conmigo, le llamaremos "uno") me pedía no muy originalmente que le diera todo lo que tenía, a lo que yo reaccioné dándole mi cartera sin un sólo centavo, mis cigarros casi recien comprados y mi celular no muy ostentoso, igual reaccionó mi novia con el hijo de su puta madre 2 ("dos").
Todo estuvo muy raro, ofrecimos que se llevaran el carro pero que nos dejaran tranquilos y no accedieron, ellos querían sólo las carteras y los celulares, y picarme con la pistola en las costillas lo que me dejó adolorido, y encañonar a mi novia en la barriga lo cual me provocó un coraje que me duró toda la noche con todo y actuación dramática mientras dormía (hablo dormido).
Fuga, México está bien culero y más Chihuahua. Uno y dos: chinguen a toda su madre.
Javier | | # | 
